Estados Unidos ► Este lunes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió en la Casa Blanca a su homólogo ucraniano Volodímir Zelensky, acompañado por líderes europeos como Emmanuel Macron, Keir Starmer, Friedrich Merz, Giorgia Meloni y Ursula von der Leyen. La reunión, celebrada días después de la cumbre Trump-Putin en Alaska, buscó reactivar las negociaciones de paz en el conflicto entre Rusia y Ucrania, que ya supera los tres años.
Durante el encuentro, Trump reiteró su intención de facilitar una cumbre trilateral con Putin y Zelensky, aunque evitó comprometerse con un alto al fuego inmediato. “La paz puede lograrse incluso mientras los países están en guerra”, declaró, sugiriendo que un cese de hostilidades no es condición indispensable para avanzar en un acuerdo.
Zelensky, por su parte, rechazó las propuestas territoriales presentadas por Moscú, que incluían la cesión de parte de Donetsk. El mandatario ucraniano insistió en que “no se reconocerá ninguna ocupación” y que cualquier acuerdo debe incluir garantías de seguridad sólidas, similares al artículo 5 de la OTAN.
La delegación europea, liderada por Finlandia y la OTAN, acudió con el objetivo de evitar presiones unilaterales de Trump sobre Zelensky y asegurar que cualquier salida negociada no comprometa la seguridad continental. Diplomáticos europeos advirtieron que están listos para intensificar sanciones contra Rusia si se detecta estancamiento en las negociaciones.
Aunque no se emitió un comunicado conjunto al cierre de la reunión, fuentes cercanas a la Casa Blanca confirmaron que Trump planea contactar a Putin en las próximas horas para discutir los avances. Zelensky calificó el encuentro como “una oportunidad para acercar posiciones” y reiteró que Ucrania está dispuesta a trabajar con “máximo esfuerzo” para lograr una paz confiable.
La reunión marca un punto de inflexión en la estrategia diplomática de Washington, que busca posicionarse como mediador clave en el conflicto, mientras se mantiene la presión sobre Kyiv para aceptar términos que aún dividen a sus aliados. ■


