Francia ► El expresidente francés Nicolas Sarkozy abandonó este lunes la cárcel parisina de La Santé, donde permaneció 20 días tras ser condenado por asociación ilícita en el caso de financiamiento ilegal de su campaña presidencial de 2007 con recursos provenientes del régimen de Muamar Gadafi. Se convirtió así en el primer jefe de Estado francés en cumplir prisión desde la Segunda Guerra Mundial. El Tribunal de Apelación de París aceptó su solicitud de libertad condicional, amparada en la legislación que permite este beneficio a mayores de 70 años, aunque le impuso estrictas medidas de control judicial, incluida la prohibición de salir del país y de mantener contacto con el ministro de Justicia, Gérald Darmanin.
Sarkozy, de 70 años, calificó su paso por prisión como una “pesadilla” durante la audiencia en la que compareció por videoconferencia. Agradeció al personal penitenciario por haber hecho más llevadera su estancia y reconoció que la experiencia fue “muy dura y extenuante”. El exmandatario permaneció en régimen de aislamiento, con policías en la celda contigua para garantizar su seguridad. Su abogado, Christophe Ingrain, argumentó que la reclusión representaba una amenaza para su cliente, mientras la fiscalía se mostró favorable a liberarlo bajo supervisión judicial.
La condena contra Sarkozy se basa en la acusación de que allegados suyos gestionaron recursos de Libia para financiar su campaña de 2007, aunque el tribunal no pudo demostrar que el dinero se utilizara directamente en la contienda. El fallo subrayó la “excepcional gravedad de los hechos” y ordenó su ingreso inmediato en prisión, decisión que el propio expresidente calificó de “escándalo judicial”. El juicio en apelación está previsto para marzo de 2026, y se suma a otras causas abiertas contra el político conservador, quien ya acumula dos condenas previas por corrupción, tráfico de influencias y financiamiento ilegal de campaña en 2012. ■


