Estados Unidos ► Microsoft anunció que reemplazará la icónica “pantalla azul de la muerte” (BSOD) por una nueva interfaz de error en negro simplificado que abolirá el emoticono de cara triste y el código QR característicos de Windows.
La nueva pantalla, parte de la iniciativa Windows Resiliency Initiative y su función Quick Machine Recovery, mostrará únicamente el mensaje “Se ha producido un problema en tu equipo y necesita reiniciar”, una barra de progreso con porcentaje, y en letra pequeña los datos técnicos esenciales del fallo, como el código de detención y el archivo o controlador implicado.
Este rediseño minimalista busca alinearse con los principios de estética y usabilidad de Windows 11, reducir la ansiedad del usuario ante errores graves y acelerar la recuperación del sistema. Microsoft asegura que, junto al cambio visual, optimizará el volcado de memoria para que la mayoría de dispositivos complete el reinicio en apenas dos segundos.
La compañía presentó esta novedad en su blog oficial y la habilitará en todos los equipos con Windows 11 versión 24H2 “a finales del verano de 2025”. Con ello, pretende ofrecer mayor claridad para técnicos y usuarios, al tiempo que refuerza herramientas de recuperación remota desde Windows Update sin necesidad de acceso físico al dispositivo.
El golpe definitivo a la BSOD llega tras el colapso masivo registrado en julio de 2024, cuando una actualización defectuosa del software de seguridad CrowdStrike activó millones de pantallas azules en aeropuertos, hospitales y oficinas en todo el mundo. Con el pantallazo negro, Microsoft busca dejar atrás esa imagen de inestabilidad y modernizar la señalización de errores críticos en su sistema operativo. ■