Veracruz ► Mientras dentro del Congreso del Estado se llevaba a cabo el homenaje póstumo al ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, fuera del recinto se concentró un grupo de activistas y familiares de personas desaparecidas, quienes manifestaron su profundo rechazo ante el acto. Portando lonas y pancartas –entre ellas, una que exhibía el impactante mensaje “Guardia de Horror”–, los manifestantes denunciaron lo que consideran la normalización de un legado marcado por actos de violencia, impunidad y desapariciones durante la administración del exgobernador (2004–2010).
La ceremonia oficial, organizada a solicitud de la familia de Fidel Herrera, contó con la presencia de políticos, excolaboradores y diversos representantes de la vida pública del estado. Durante el homenaje se presentaron las cenizas del ex mandatario, evento que pretendía resaltar la trayectoria y las obras de infraestructura impulsadas en su gestión. Sin embargo, para un sector de la ciudadanía, el acto resultó ser un cara o cruz de dos legados: mientras para algunos es motivo de recuerdo, para otros simboliza el dolor de las familias que aún sufren las secuelas de desapariciones y violaciones a los derechos humanos cometidas en esos años turbulentos.
Entre los que se alzaron voces de rechazo, participaron activistas de derechos humanos y familiares marcados por la pérdida de sus seres queridos. “No podemos aceptar que se rinda tributo a un pasado en el que se permitieron hechos que dejaron a cientos de familias sin respuestas ni justicia”, expresó uno de los manifestantes, resaltando la indignación que mueve a quienes reclaman una memoria histórica que honre a las víctimas y no a quienes, según ellos, encarnaron la impunidad. A lo largo de la protesta se difundieron imágenes y videos en redes sociales que muestran la contundencia del reclamo y la emotividad del grupo. ■
