Morelos ► El fotoperiodista Rodrigo Moya, cuya obra trascendió fronteras por su aguda mirada sobre las luchas sociales de los años cincuenta y sesenta, falleció este miércoles en su residencia de Cuernavaca, a los 91 años. La Fototeca Nacional del INAH y la Secretaría de Cultura federal confirmaron la noticia y lamentaron la pérdida de una figura clave del fotoperiodismo latinoamericano.
Nacido en Medellín, Colombia, en 1934 y nacionalizado mexicano, Moya inició su carrera en 1955 colaborando con la revista Impacto bajo la tutela del reportero Guillermo Angulo. Durante la década de 1960 integró el Departamento de Catálogo y Restauración del INAH, documentando movimientos revolucionarios en Cuba y retratando momentos históricos con un enfoque humanista y comprometido.
Entre sus trabajos más célebres destaca el retrato “Che melancólico” de Ernesto “Che” Guevara, capturado en La Habana en 1964, así como imágenes de Gabriel García Márquez tras el altercado con Mario Vargas Llosa, y sesiones con Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros. Su lente exploró tanto los claroscuros de la historia como la cotidianidad de comunidades rurales y urbanas.
Reconocido con la Medalla al Mérito Fotográfico del Sistema Nacional de Fototecas del INAH en 2007, Moya celebró en 2019 la exposición “Rodrigo Moya. México/Periferias” en el Centro de la Imagen y el Palacio de Bellas Artes, muestra que consolidó su legado de memoria visual y verdad histórica.










Sus archivos, reunidos en su casa morelense, superan las 30 mil imágenes que describen procesos sociales y culturales de América Latina. A través de estas fotografías, Moya deja un testimonio indeleble de su compromiso con la justicia, la dignidad y la memoria colectiva. ■ (Imágenes tomadas de La Jornada)