Ciudad de México ► El gobierno de Estados Unidos anunció hoy, a través de una proclamación presidencial firmada por Donald Trump, que los aranceles a las importaciones de acero y aluminio se incrementarán del 25% al 50%. La medida, que se enmarca dentro de la estrategia para proteger a la industria siderúrgica estadounidense, entrará en vigor a las 00:01 horas (hora del este) del miércoles 4 de junio de 2025, lo que equivale a las 22:01 horas del día de hoy en Ciudad de México.
En la orden ejecutiva, Trump justificó el aumento como una respuesta a la creciente presión por parte de la industria nacional, que ha sido afectada por la apertura de mercados y la importación de estos productos a precios muy bajos. La administración señala que esta acción protegerá el empleo y la competitividad del sector, considerado vital para la seguridad nacional y la economía del país.
La medida afecta a todos los países exportadores, e incluye a socios comerciales tradicionales como México, Canadá y Brasil. A pesar de que algunos acuerdos comerciales habían puesto a estos socios en condiciones especiales, este nuevo decreto los incluye en la aplicación general del incremento arancelario. La expectativa en el sector industrial es que la política genere un repunte en los precios de ambos metales y, a su vez, impacte en las cadenas de suministro globales.
Expertos en comercio internacional advierten que el endurecimiento de los aranceles podría provocar tensiones en las relaciones comerciales, ya que países afectados ya han manifestado su preocupación por una posible escalada en la guerra comercial. Por otro lado, sectores manufactureros de Estados Unidos respaldan la decisión, señalando que permitirá nivelar el campo de juego en la competencia internacional.
Mientras tanto, el mercado ya muestra señales de respuesta, con un incremento en los precios de futuros del acero, lo que confirma el impacto inmediato de la medida en los precios internacionales. Los analistas estarán atentos a las reacciones de los países afectados, quienes tienen la oportunidad de presentar propuestas de revisión a través de instancias como la Organización Mundial del Comercio (OMC). ■
