Ciudad de México ► El pasado 31 de octubre se celebró el Día Mundial del Ahorro, una conmemoración que nos invita a reflexionar sobre la importancia de una buena gestión financiera. En un contexto donde las deudas son una parte inevitable de nuestra vida económica, es crucial aprender a manejarlas de manera estratégica para potenciar nuestro ahorro y capacidad de generar patrimonio.
Contrario a la creencia popular, las deudas no son enemigas del ahorro. Saber aprovechar los créditos de forma inteligente puede aumentar notablemente nuestra capacidad para crear ingresos y, por ende, patrimonio. Sin embargo, es precisamente en este punto donde la educación financiera juega un papel fundamental. El abuso de las deudas, especialmente las generadas por tarjetas de crédito y créditos personales, puede conducir al sobreendeudamiento, comprometiendo así nuestras finanzas personales y limitando nuestra capacidad de ahorro a largo plazo.
Para evitar caer en este ciclo perjudicial, los expertos sugieren realizar una evaluación exhaustiva de la utilidad del crédito que se pretende contratar. Es esencial que dicho crédito esté alineado con nuestras metas financieras. Utilizar las tarjetas de crédito responsablemente, limitando el uso a un máximo del 30% de la línea disponible, junto con realizar pagos puntuales, es una estrategia recomendada para proteger nuestro historial crediticio y asegurar que mantengamos liquidez en el futuro.
Además, estar pendientes de nuestros estados de cuenta es vital. Este hábito no solo nos permite tener una visión clara de nuestros gastos e ingresos, sino que también nos proporciona información valiosa que puede mejorar nuestra planificación financiera y optimizar nuestros recursos en meses futuros. Con esta transparencia, podemos identificar áreas donde reducir gastos y, al mismo tiempo, incrementar nuestro ahorro.
Por último, es fundamental que, mientras trabajamos para aumentar nuestros ahorros, nuestro dinero también esté generando rendimientos. Invertir en instrumentos como CETES, fondos de inversión o incluso criptomonedas se presenta como una alternativa viable para evitar que la inflación erosione el valor de nuestros ahorros.
El Día Mundial del Ahorro es una oportunidad para replantear nuestra relación con las deudas y el ahorro. La clave reside en educarnos financieramente y adoptar hábitos que nos permitan disfrutar de una vida económica saludable, donde nuestras decisiones sean siempre estratégicas y orientadas hacia el crecimiento patrimonial sostenido. ■
