Ciudad de México ► En la madrugada de este lunes, la Secretaría de Marina confirmó a través de su cuenta oficial en X que 172 cadetes y 2 oficiales de la Heroica Escuela Naval Militar, junto a un capitán, un oficial y tres clases integrantes de la tripulación del Buque Escuela Velero Cuauhtémoc, arribaron de regreso al puerto de Veracruz. Este operativo se realizó después del accidente sufrido la noche del sábado en la ciudad de Nueva York, que lamentablemente cobró la vida a dos cadetes y dejó varios heridos.
El incidente ocurrió durante la maniobra de zarpe del buque desde Nueva York. Según información proporcionada por el alcalde de la ciudad, Eric Adams, el navío perdió potencia y, en lugar de dirigirse hacia mar abierto, siguió una trayectoria ininterrumpida por el East River hasta chocar contra el Puente de Brooklyn. Diversos videos difundidos en redes sociales muestran momentos en los que algunos marineros se encontraban en las vergas y jarcias del barco, lo que evidenció la gravedad de la situación en el instante del impacto.
Con 277 personas a bordo en el momento del accidente, el buque presentó daños considerables: dos mástiles se doblaron y otro fue completamente cercenado. Asimismo, se reportó que 19 personas resultaron heridas, de las cuales dos se encuentran en estado crítico, y los cuerpos de dos cadetes fallecidos fueron trágicamente recuperados. Testimonios de familiares, como el de Aldo Ordóñez –hermano de una cadete lesionada–, describen la escena como “muy espectacular”, haciendo énfasis en la falta de tiempo para reaccionar ante el inminente peligro.
El Buque Escuela Cuauhtémoc, que había zarpado el pasado 6 de abril desde Acapulco para un viaje de formación de siete meses, venía cumpliendo una importante gira internacional. La escala en Nueva York fue un hito de celebración, al haber atracado con gran despliegue y recibido a cientos de visitantes, antes de continuar su itinerario hacia Islandia. La tragedia ha marcado un abrupto cambio en la agenda del buque, generando una intensa labor coordinada entre la Cancillería, Aeroméxico y las autoridades navales para la atención y repatriación del personal afectado.
Por su parte, la Agencia de Seguridad en el Transporte (NTSB) de Estados Unidos, en colaboración con técnicos de la Secretaría de Marina, ha iniciado una investigación para esclarecer las causas del accidente. Entre las hipótesis que se están considerando se encuentran posibles fallas mecánicas y errores en la maniobra, aspectos que serán evaluados con rigor y transparencia para evitar que hechos similares se repitan en el futuro.
El retorno del personal y la coordinación entre diversas dependencias han sido fundamentales para atender la emergencia, aunque aún permanecen dos cadetes en Nueva York recibiendo atención médica especializada. Las autoridades continúan informando sobre los avances en la investigación mientras se implementan las medidas pertinentes para apoyar a las familias de las víctimas y a la comunidad naval, en un contexto de duelo nacional. ■