Chiapas ► El Movimiento de Parteras de Chiapas, Nich Ixim, que agrupa a cerca de 600 parteras de 45 municipios de la entidad, emitió hoy un pronunciamiento en el marco del Día Internacional de la Partera (5 de mayo) para exigir al gobierno federal y a las autoridades de salud el reconocimiento legítimo y la protección de la partería tradicional. Las integrantes del movimiento consideran que la reciente Norma Oficial Mexicana NOM-020-SSA-2025, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 4 de marzo de 2025, constituye “una amenaza a la existencia misma de la partería tradicional”.
Según el comunicado, la norma se fundamenta en un modelo biomédico que impone requisitos de control, regulación y condicionamiento —como la obligación de inscribirse en el Registro Nacional de Partería (Renapa)— sin tener en cuenta sus saberes y métodos de atención propios, lo que además imposibilita que los niños y niñas atendidos puedan acceder a su acta de nacimiento.
En el documento, las parteras denuncian la discriminación histórica a la que han sido sometidas y sostienen que la normativa desconoce los avances introducidos por la reforma de la Ley General de Salud, aprobada el 26 de marzo de 2024, que buscaba integrar de manera respetuosa y flexible su oficio en el sistema nacional de salud. “No se nos debe relegar a ser meras canalizadoras de mujeres hacia clínicas y hospitales; exigimos poder atender los partos en nuestras propias comunidades, preservando el conocimiento ancestral que nos ha permitido garantizar nacimientos en condiciones de dignidad”, afirmaron representantes del movimiento.
La exigencia incluye también el cumplimiento del artículo 389 Bis de la Ley General de Salud, el cual reconoce el derecho de las parteras a expedir certificados de nacimiento, un mecanismo que se ha visto reiteradamente vulnerado al negárselos a los infantes atendidos por ellas. Además, Nich Ixim reclama que se capacite a todo el personal de salud —incluidos directivos y guardias de seguridad— para brindar una atención intercultural, respetuosa y sin discriminación a los pueblos indígenas y afrodescendientes, contribuyendo así a un modelo de salud colaborativo y ajustado a la diversidad cultural.
Diversos expertos en salud pública y organizaciones indígenas han mostrado su respaldo a las demandas de Nich Ixim, señalando que la partería tradicional es una práctica milenaria fundamental para preservar la identidad cultural de los pueblos originarios y garantizar una atención materno-infantil adaptada a las necesidades locales. La defensa de estos saberes ancestrales, consideran, puede contribuir a reducir las brechas de desigualdad en el acceso a servicios de salud y mejorar los indicadores de bienestar en comunidades rurales. ■