Ciudad de México ► El gobierno de México anunció un ambicioso censo nacional para evaluar la situación legal de casi un millón de viviendas en abandono, muchas de ellas vandalizadas o habitadas de manera irregular, que busca ofrecer soluciones tanto a los propietarios originales como a los ocupantes actuales, garantizando certeza jurídica y condiciones dignas de vivienda.
El censo, que comenzó el lunes 14 de abril, será liderado por la Secretaría del Bienestar, en colaboración con el Infonavit y el Fovissste. Según el director del Infonavit, Octavio Romero Oropeza, el objetivo es identificar cuántas viviendas están abandonadas, vandalizadas o ocupadas irregularmente, y diseñar estrategias para su recuperación.
Romero Oropeza enfatizó que no habrá desalojos. “Se trata de encontrar soluciones para todas las familias que ocupan estas viviendas”, afirmó. Además, destacó que muchas de estas propiedades son resultado de políticas fallidas del pasado, que impulsaron créditos impagables y desarrollos sin planeación adecuada.
El censo abarcará 845 mil viviendas financiadas por el Infonavit y 90 mil por el Fovissste. La vocal ejecutiva del Fovissste, Jabnely Maldonado, señaló que este esfuerzo permitirá dimensionar la magnitud del problema habitacional y avanzar en su resolución.
Como parte de esta estrategia, el Infonavit ha implementado un programa de reestructuración masiva que ya ha beneficiado a más de 4 millones de personas con créditos impagables. Desde el inicio del actual sexenio, se congelaron saldos de 2 millones de financiamientos problemáticos, y en una segunda etapa, se sumaron otros 2 millones. Además, desde marzo, se activaron reducciones automáticas en tasas de interés, mensualidades y saldos.
El gobierno federal también ha elevado su meta sexenal de vivienda, con la construcción de 1.1 millones de casas nuevas y la entrega de 1 millón de escrituras. Estas acciones buscan atender el rezago habitacional con una visión de inclusión, desarrollo urbano sustentable y fortalecimiento económico. ■