Ciudad de México ► En respuesta a una solicitud de Estados Unidos, el gobierno mexicano extraditó a 29 líderes y operadores de los cárteles de Sinaloa, Caborca, Jalisco Nueva Generación, del Golfo, La Familia Michoacana y Beltrán Leyva. La decisión fue tomada por el gabinete de seguridad nacional, sin la intervención de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, según informaron integrantes del gabinete.
Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), explicó en conferencia de prensa que la medida se tomó para evitar la liberación o el retraso en los procesos de extradición de estos individuos, debido a acuerdos con algunos jueces que buscaban favorecerlos. Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), añadió que la Ley de Seguridad Nacional establece los parámetros para garantizar la estabilidad política tanto en México como en Estados Unidos.
La extradición de estos capos tiene como objetivo disminuir la violencia en México, proteger a la ciudadanía y combatir la impunidad. Entre los extraditados se encuentran los hermanos Omar y Miguel Ángel Treviño Morales, ex líderes de Los Zetas; José El Chango Méndez, fundador de Los Caballeros Templarios; y Rafael Caro Quintero, iniciador del cártel de Guadalajara en los años 70 y recientemente del cártel de Caborca.
Respecto a la posible aplicación de la pena de muerte a algunos de estos capos, Gertz Manero aclaró que las sentencias serán determinadas por los jueces estadounidenses y que, conforme a los acuerdos entre México y Estados Unidos, no se puede aplicar la pena capital, ya que no existe en las leyes mexicanas.
El operativo de traslado involucró a 3,512 elementos, 342 vehículos y 20 aeronaves de diversas instituciones, incluyendo las secretarías de la Defensa Nacional, Marina y Seguridad, la Guardia Nacional y el Centro Nacional de Inteligencia, así como la Fiscalía General de la República. ■


