Hong Kong ► Hong Kong vive una de sus tragedias urbanas más graves en los últimos años tras el incendio que arrasó varios bloques de viviendas en el distrito de Tai Po. El fuego, que comenzó en los andamios de bambú instalados por trabajos de renovación, se propagó rápidamente y alcanzó nivel 4 de alarma. De acuerdo con el Departamento de Bomberos, al menos 13 personas han perdido la vida y otras 15 resultaron heridas, mientras que un número indeterminado de residentes permanece atrapado en los edificios. Entre las víctimas se cuentan ocho mujeres, tres hombres y un bombero que participaba en las labores de extinción.
El siniestro, que ya supera las seis horas de duración, afecta a cuatro bloques del complejo Wang Fuk Court, donde habitan cerca de 4,000 personas. Vecinos han expresado indignación por la aparente lentitud en la respuesta, recordando que en obras cercanas se habían impuesto multas por trabajadores fumando en áreas de riesgo. La magnitud del incendio ha impedido a las autoridades realizar registros piso por piso, lo que mantiene la incertidumbre sobre el número de personas atrapadas. En paralelo, organizaciones de rescate animal estiman que más de un centenar de mascotas permanecen dentro de los edificios, y el Hong Kong Pet Club ha desplegado ambulancias veterinarias para atender a los animales rescatados.
El complejo, actualmente en proceso de renovación por un valor de 42 millones de dólares, ya había generado descontento entre residentes por las condiciones de seguridad. Este incidente vuelve a poner en el centro del debate el uso de andamios de bambú, una práctica común en Hong Kong por su bajo costo y ligereza, pero que ha sido cuestionada por su vulnerabilidad frente al fuego. ■



