Estados Unidos ► Nueva York conmemora hoy el 24 aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 con actos solemnes en la Zona Cero, el Pentágono y Shanksville, en recuerdo de las 2,977 víctimas mortales y del impacto perdurable en la ciudad y en Estados Unidos. La jornada incluye la tradicional lectura de nombres, seis momentos de silencio que marcan los tiempos de los impactos y colapsos, y homenajes institucionales, con un refuerzo visible de seguridad en el perímetro del Memorial del World Trade Center.
La conmemoración comenzó alrededor de las 8:40 a.m. con procesión de bandera, gaiteros y tambores; la lectura de nombres es intercalada por seis silencios que señalan los momentos exactos de los ataques y derrumbes. El acto principal, reservado a familiares, sobrevivientes y autoridades, concluye cerca de las 12:15 p.m.; el memorial reabre al público aproximadamente a las 3:00 p.m..
El NYPD dispuso restricciones de tránsito en el Bajo Manhattan (entre Barclay Street, Rector Street, Broadway y West Street, entre otras vías adyacentes). La zona del memorial permaneció cerrada al público general durante la ceremonia, con fuerte presencia policial en calles y azoteas cercanas.
Por la noche, el “Tribute in Light” proyectará dos columnas de luz azul visibles a larga distancia, mientras diversos edificios se iluminan del mismo tono como gesto de homenaje en toda la ciudad.
La representación institucional en Nueva York incluyó a autoridades locales y exalcaldes; el vicepresidente JD Vance estaba programado para asistir, pero cambió su agenda para viajar a Utah tras el asesinato del comentarista conservador Charlie Kirk, de acuerdo con reportes difundidos esta mañana. Paralelamente, el presidente Donald Trump participa en un acto conmemorativo en el Pentágono y tiene previsto trasladarse más tarde a Nueva York para un partido de los Yankees.
En un contexto de tensión política, medios locales subrayan que la conmemoración busca evitar capitalizaciones partidistas y preservar el sentido de memoria y unidad, según enfatizó la dirección del Museo Memorial del 11-S.
Más allá del recuerdo de las casi 3,000 personas fallecidas en 2001, organizaciones y autoridades destacan que persisten muertes derivadas de enfermedades respiratorias y cánceres vinculados a la exposición al polvo tóxico tras el colapso de las torres. La directora del Museo Memorial del 11-S, Elizabeth Hillman, afirmó que desde entonces “han fallecido muchas más personas por los efectos sobre su salud que las que murieron ese mismo día”; entre ellas, más de 400 bomberos que participaron en las labores de rescate, cifra que supera a los 343 caídos el 11-S.
En la ceremonia de hoy también se rinde homenaje a quienes han muerto posteriormente por secuelas relacionadas, así como a trabajadores, socorristas y sobrevivientes, manteniendo vivo el relato de resiliencia y servicio público que emergió de la tragedia. ■