Ciudad de México ► La Asamblea Nacional de Usuarios de la Energía Eléctrica (ANUEE) fundamentó su última movilización en la resolución 64/292 de la Asamblea General de la ONU, que insta a los Estados a garantizar el acceso universal a servicios básicos como agua y saneamiento, y subraya el carácter implícito del derecho a la electricidad para ejercer plenamente otros derechos —salud, educación, vivienda y alimentación—.
Durante la jornada del 11 de agosto, la ANUEE marchó desde el cruce de Paseo de la Reforma e Insurgentes rumbo al Zócalo capitalino, donde el plantón fue impedido por cierres viales. Ante ello, bloqueó cuatro puntos clave de la CDMX —Fray Servando con Eje Central, Fray Servando con Circunvalación, Circunvalación con Eje 1 Norte y Eje 1 Norte con Eje Central— durante más de dos horas, para exigir una audiencia pública con la presidenta Claudia Sheinbaum.
Entre sus demandas figura la renacionalización total de la industria eléctrica, el restablecimiento de la CFE como entidad 100% pública, la implementación de una tarifa social justa y la condonación de adeudos de usuarios de bajos ingresos. Asimismo, reclaman el reconocimiento expreso de la electricidad como derecho humano en la Constitución y en la Ley del Sector Eléctrico.
La ANUEE recordó que, tras su creación en 1937, la CFE operó como organismo del Estado al servicio de la población. Sin embargo, las reformas de 2013-2014 la transformaron en empresa productiva, abriendo la puerta a intereses privados y encareciendo las tarifas, lo que, a su juicio, contraviene la obligación constitucional de ofrecer un suministro continuo, de calidad y asequible.
Los usuarios advirtieron que mantendrán sus acciones mensuales de protesta hasta obtener un compromiso formal del Gobierno federal y denunciaron la criminalización de quienes resisten cortes injustificados o tarifas impagables, hecho que, aseguran, profundiza la desconfianza en las instituciones encargadas de garantizar el servicio. ■